A Georbis Martinez. Pinocho!
Por las tardes nos leian cuentos infantiles y algunos dias venian los titiriteros con sus marionetas y falsetes. Los cuentos de hadas son toda una mitologia. Cuando los recuerdo, se me despiertan leyendas y suegnos que llegan como en un vano llendose hacia la orilla . Nada extraordinario! Pero habia uno que le resultaba interesante y divertido "Pinocchio". Abondona el camino a casa y vende sus libros para entrar a ver un teatro de marionetas ambulante, se deja enganar por un zorro y un gato y no se cuantas cosas mas. Este pedazo de madera que queria ser un nigno real llega a The Land of Play y a los pocos dias le comienzan a salir orejas de burro y cola de burro. En esta tierra tan peculiar se podia pasar el dia entero jugando. Asi mas o menos va la historia que hoy les presento escasa de detalles. Yo recuerdo que alguien me la conto una tarde en la escuela. En esta ciudad-mandibula que vivo no hago mas que pensar como relacionarme con ella, quiero decir, como llegar a un acuerdo. Evitando siempre el o te vas tu o me voy yo aquel de Mahoma! Con tal de no reconciliarme nunca con la ciudad pagaria altos precios. Pero es diferente e impersonal, la ciudad kitsch! The Land of Play and The Land of Death! Deliro del calor y de las ganas de amanecer en otra parte. Pienso que alguna vez el escritor ha de faltar a la verdad. A su propia verdad, quiero decir. El escritor se divorcia de la verdad alguna vez? No es una cuestion de adivinar pero hasta pueden a veces predecir e inventar profesias. Observo a mi alrededor con preocupacion y de repente algo se me presenta como un presagio! -Sabra la terrible forma en que debera huir? o es que ya le han comenzado a salir unas orejas y una cola de burro?- Imagino en el silencio.
la imagen pertenece a una de las escenas de la obra de teatro Icaros, con texto de Jorge Espinoza sobre una idea de Carlos Dias, el a su vez director del Teatro El Pulico.
Por las tardes nos leian cuentos infantiles y algunos dias venian los titiriteros con sus marionetas y falsetes. Los cuentos de hadas son toda una mitologia. Cuando los recuerdo, se me despiertan leyendas y suegnos que llegan como en un vano llendose hacia la orilla . Nada extraordinario! Pero habia uno que le resultaba interesante y divertido "Pinocchio". Abondona el camino a casa y vende sus libros para entrar a ver un teatro de marionetas ambulante, se deja enganar por un zorro y un gato y no se cuantas cosas mas. Este pedazo de madera que queria ser un nigno real llega a The Land of Play y a los pocos dias le comienzan a salir orejas de burro y cola de burro. En esta tierra tan peculiar se podia pasar el dia entero jugando. Asi mas o menos va la historia que hoy les presento escasa de detalles. Yo recuerdo que alguien me la conto una tarde en la escuela. En esta ciudad-mandibula que vivo no hago mas que pensar como relacionarme con ella, quiero decir, como llegar a un acuerdo. Evitando siempre el o te vas tu o me voy yo aquel de Mahoma! Con tal de no reconciliarme nunca con la ciudad pagaria altos precios. Pero es diferente e impersonal, la ciudad kitsch! The Land of Play and The Land of Death! Deliro del calor y de las ganas de amanecer en otra parte. Pienso que alguna vez el escritor ha de faltar a la verdad. A su propia verdad, quiero decir. El escritor se divorcia de la verdad alguna vez? No es una cuestion de adivinar pero hasta pueden a veces predecir e inventar profesias. Observo a mi alrededor con preocupacion y de repente algo se me presenta como un presagio! -Sabra la terrible forma en que debera huir? o es que ya le han comenzado a salir unas orejas y una cola de burro?- Imagino en el silencio.
la imagen pertenece a una de las escenas de la obra de teatro Icaros, con texto de Jorge Espinoza sobre una idea de Carlos Dias, el a su vez director del Teatro El Pulico.
1 comment:
dicen que el sabio no cambia su aldea por una ciudad.
al final no importa si The Land of Play te invita te invita a la tranquilidad/sosiego/mediocridad, no importa como la ciudad se te presenta, importa como quieras leerla.
eso, imaginacion.
una persona que carezca de ese suegno, solo ve palabras de diccionario en un poema.
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